
Olvidado quiero que estés, como el inconsciente sin psicología cerca. La paz quiero encontrar para poder así, todo lo que sentí olvidar. Aunque ese sufrimiento me a hecho reflexionar, me a hecho crecer, me ah hecho madurar no lo quiero recordar. Aunque la palabra “si “esté cerca de esa relación viperina. Aunque me duela quiero seguir mi razón, aunque no siento el odio te odiare, aunque no sienta el olvido te olvidare, aunque no quiera lo hare, solo para evadir el eco de ese “no lose”. Me agarro al optimismo con cuidado de no caer en el fondo del estomago de esa serpiente. Muchas cosas por decir tiene mi inconsciente, nos encontramos en una escalera solo puedo mirarte, eres como una pared para mí, me sorprende encontrarte, tú que siempre estas huyendo de mi ser. Las palabras se me encogen y se transforman en aire. Te miro, expiro las palabras convertidas en aire tu pones cara de sorprendido, mi cuerpo no reacciona, el color de tus ojos y tu gesto encienden el corazón y no deja que oiga la voz de la razón. Subiendo el volumen de mis pensamientos empiezo a subir escaleras viendo tu silueta delante y viendo como sonríes. En esos momentos condenados, tengo que ser fuerte, todo a su tiempo, ahora solo me queda esperar y disfrutar cada momento que me impone la vida.
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